Nyons: Tierra de olivos y cuna de la aceituna negra más exquisita de Provenza
Explora la historia, el cultivo y el arte detrás de la oliva de Nyons, una joya de la Provenza francesa protegida por denominación de origen y famosa por su sabor inconfundible.
Nyons, Francia foto por: Drome Provencale
Nyons: Tierra de olivos y sabor ancestral en el corazón de Provenza
En el corazón del Drôme provenzal, entre colinas suaves y valles bañado por el sol, se encuentra Nyons, un pueblo que guarda una herencia milenaria: el cultivo del olivo. Más que un árbol, aquí es símbolo de identidad, de resiliencia y de una cocina con raíces profundas.
La variedad que reina en estas tierras es la Tanche, una aceituna negra única, tan apreciada que fue la primera en Francia en recibir la AOC (Appellation d’Origine Contrôlée) en 1994. Su sabor, su textura y su historia hacen de Nyons un santuario del aceite de oliva y de la tradición mediterránea más pura.
Un árbol que desafía el tiempo
El olivo en Nyons no es una simple planta agrícola: es un monumento vivo. Su cultivo se remonta a la época romana y, a pesar de las heladas destructoras del siglo pasado, ha sobrevivido gracias al cuidado paciente de generaciones de agricultores.
Lo que distingue a los olivos de esta región es su adaptación al microclima del valle: inviernos suaves, veranos cálidos y un aire seco que reduce enfermedades y permite una agricultura menos intervenida.
Estos árboles, de troncos retorcidos y cortezas plateadas, son tratados casi como miembros de la familia. Se cultivan en terrazas de piedra seca y se cosechan con respeto, siguiendo el ritmo de la naturaleza.
Foto de Vasilis Caravitis en Unsplash
La Tanche: la reina negra de las aceitunas
La aceituna Tanche es la joya de Nyons. Su pulpa es suave, carnosa y de sabor redondo, casi dulce. A diferencia de otras aceitunas negras que se curan artificialmente, la Tanche madura completamente en el árbol, lo que le otorga una riqueza de matices única.
Se recolecta en invierno, desde diciembre hasta febrero, cuando ha alcanzado su punto justo de sobremaduración. Este momento es crucial, ya que determina tanto su uso como aceituna de mesa como para la extracción de aceite.
Foto de Melina Kiefer en Unsplash
Recolección y proceso artesanal
La recolección de las aceitunas de Nyons es un ritual de precisión y paciencia:
Cosecha manual o con peines: se evita dañar la piel delicada de la Tanche.
Clasificación inmediata: se separan las aceitunas para aceite y para conserva.
Desamargado natural: en lugar de procesos químicos, se sumergen en salmuera suave durante varias semanas.
Fermentación lenta: las aceitunas de mesa fermentan de manera controlada, desarrollando aromas complejos, sin perder dulzura.
Aceite prensado en frío: el “oro verde” de Nyons es denso, de acidez baja y con notas de avellana, manzana y almendra fresca.
Denominación de origen y protección del saber hacer
Desde 1994, la aceituna de Nyons cuenta con AOC, lo que garantiza que solo los frutos cultivados y procesados en la región pueden llevar ese nombre. También se protege el método de producción tradicional y se exige un mínimo de tiempo en salmuera para su comercialización como aceituna de mesa.
Este reconocimiento no solo es legal, sino cultural: preserva una forma de vida, una relación íntima con el paisaje y una ética del gusto que se transmite con orgullo.
Foto de Vasilis Caravitis en Unsplash
En la mesa: cómo se disfruta la Tanche
Las aceitunas de Nyons se sirven solas, como aperitivo, pero también se integran en platos típicos como:
Tapenade negra
Pain d’olive (pan rústico con aceitunas)
Daubes y civets de caza
Tartas saladas con tomate confitado y queso de cabra
Ensaladas provenzales con tomates, huevo cocido y albahaca
Y por supuesto, el aceite de oliva de Nyons es el toque final perfecto para ensaladas frescas, pescados al vapor y verduras al grill.
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