Receta tradicional de tajine de cordero marroquí con ciruelas y almendras

Descubre cómo preparar un auténtico tajine de cordero al estilo marroquí, cocinado lentamente con especias, ciruelas y almendras. Una receta ancestral que honra la tradición del Magreb.

Una joya de la cocina del norte de África

El tajine de cordero con ciruelas y almendras es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía marroquí. Su origen está ligado a la cocina bereber y a la forma de vida nómada del norte de África. Este platillo combina lo salado con lo dulce, una dualidad típica de la tradición culinaria magrebí, donde las frutas secas y las especias conviven armoniosamente con las carnes y las hierbas frescas.

Este platillo no solo representa el ingenio en la cocina del desierto, sino también una filosofía culinaria basada en la paciencia, el uso de ingredientes locales y la búsqueda del equilibrio en cada bocado. Es habitual servirlo en ocasiones especiales, bodas o durante el Ramadán.

Ingredientes (4 personas)

  • 1 kg de carne de cordero (cuello o paleta, cortado en trozos)

  • 2 cebollas grandes picadas

  • 2 dientes de ajo finamente picados

  • 1 cucharadita de jengibre molido

  • 1 cucharadita de cúrcuma

  • 1/2 cucharadita de canela en polvo

  • 1/2 cucharadita de pimienta negra

  • Sal al gusto

  • Hebras de azafrán (opcional)

  • 1 ramita de canela entera

  • 1 taza de ciruelas pasas sin hueso

  • 1/2 taza de almendras peladas y tostadas

  • 2 cucharadas de miel

  • Aceite de oliva

  • Agua

  • Semillas de sésamo para decorar (opcional)

  • Cilantro fresco para terminar (opcional)

Preparación paso a paso

  1. Sellar la carne
    En un tajine tradicional (o una olla gruesa), calienta aceite de oliva y dora los trozos de cordero por todos lados para sellar los jugos.

  2. Sofrito aromático
    Agrega la cebolla y el ajo picados. Sofríe hasta que estén transparentes. Incorpora el jengibre, la cúrcuma, la pimienta, la canela en polvo y el azafrán. Mezcla bien para que las especias liberen su fragancia.

  3. Cocción lenta
    Cubre con agua hasta casi cubrir la carne. Añade la ramita de canela. Tapa el tajine y cocina a fuego bajo durante aproximadamente 1 hora y media, o hasta que la carne esté tierna y la salsa reducida.

  4. Agregar las ciruelas
    En una cacerola aparte, cocina las ciruelas en un poco de agua con la miel hasta que estén tiernas y brillantes. Agrega estas al tajine en los últimos 15 minutos de cocción.

  5. Final y decoración
    Justo antes de servir, incorpora las almendras tostadas. Si deseas, espolvorea semillas de sésamo y cilantro fresco picado por encima.

Consejos para realzar el sabor

  • Si no tienes un tajine de barro, puedes usar una olla de hierro fundido. El secreto está en cocinar a fuego muy bajo y con paciencia.

  • Las almendras se pueden tostar en seco o freír ligeramente para aportar más textura.

  • Este plato se sirve tradicionalmente con pan marroquí (khobz), aunque también puede acompañarse de cuscús.

Este tipo de preparación lenta y meditativa no solo resalta los sabores, también transforma la cocina en un acto de conexión cultural y emocional. En Marruecos, el tiempo compartido alrededor del tajine es tan importante como el plato mismo.

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